Peto, pichi y, desde que inundamos la moda con anglicismos, también dungaree u overall. Así le conocemos y así nos referirnos a él. Huyendo del típico vaquero, me fijé en este peto de terciopelo verde de Zara. Tal fue el amor por el color y por el tejido, que se convirtió en la única compra que hice sin rebajar, pagando los 25 garrotazos del señor Amancio para luego encontrarlo a 8 euros. Damn! Las cazadoras de gangas también fallan. Es un tipo de prenda que además disimula la tripa (de ahí a que siempre se asociara a la ropa premamá).

